Los docentes damos paso a nuevos retos y desafíos al mismo tiempo de tener más y mejores expectativas de nuestra labor como formadores de niñas y niños que nos enfrentan a transformar nuestra enseñanza para su propio beneficio. El personal docente ha redoblado esfuerzos para dejar ver a nuestra escuela como la deseamos. Todos nuestros esfuerzos como educadores están centrados en el aprendizaje y desarrollo integral de nuestros alumnos. Por tanto nos comprometemos y somos conscientes de nuestro papel como entes de transformación social.

Las circunstancias actuales, nos demuestran la importancia de adaptarnos a las nuevas formas de enseñanza, lo que significa que nuestro quehacer docente debe reinventarse constantemente.